lunes, 22 de abril de 2013

Lisa en teja, la especialidad de Rancho Astillero

Constitución es una de las comunas de las provincias de Talca que brinda a los visitantes un sinnúmero de posibilidades en lo que respecta a paisajes, recreación y excelente gastronomía. Una combinación perfecta de estos tres atractivos es el viaje a través del Río Maule para llegar hasta Rancho Astillero, ubicado a ocho kilómetros de Constitución. Hasta este lugar se accede en bote o lancha pasando, en principio, por las costas ubicadas a pocos metros de la desembocadura del río, adornadas con el colorido de los botes pesqueros; el recorrido continúa luego por entre los cerros poblados de pinos, hasta llegar al rancho, un cálido rincón que forma parte de una inmensa propiedad que otrora perteneciera a los monjes jesuitas y en la actualidad se encuentra dividida en infinidad de terrenos que son arrendados a pequeños productores para el cultivo o la crianza de ganado. Es justamente aquí donde el turista puede disfrutar de un delicioso plato típico a base de pescado, la “Lisa en Teja”; cuyo origen, también se remontaría a la época de los jesuitas. La lisa es un pez de mar que remonta las aguas del caudaloso Río Maule, donde es pescada para el consumo familiar o para comercializarla. Al final del verano o “con las primeras aguas”, como dicen nuestros anfitriones, retornan hacia el mar. La preparación es sencilla, sin embargo la particularidad de este manjar está justamente en la forma en que se lo cocina: una vez limpias, las lisas se abren y se condimentan con sal, ajo picado, orégano, manteca, cebolla y tomate en rodajas. Una vez sazonadas se envuelven en papel aluminio y son colocadas entre dos tejas de cerámica (de las que se usan para los techos) y se llevan al fuego, colocándolas sobre una estructura metálica; en esta especie de “horno” tan particular las lisas, que pueden pesar hasta cuatro kilos, se cocinan durante 20 o 30 minutos, tras lo cual están listas para ser degustadas allí mismo, bajo la sombra de los parrales, acompañadas de ensalada de tomates y cebolla, pebre, pan y vinos caseros.

Payunia. Paz y belleza nacidas de la furia

Uno de los campos volcánicos más grandes de América del Sur se encuentra prácticamente oculto entre un sinfín de dunas negras, amarillas, rojas y azules a unos 200 kilómetros de la ciudad de Malargüe. Esta región posee, en promedio, más de diez volcanes cada cien kilómetros cuadrados y se han contabilizado en ella al menos ochocientos conos. La variedad vulcanológica de la zona convierte a este paisaje en uno de los más particulares y llamativos de la provincia de Mendoza. Los restos del material volcánico que se disemina a lo largo de la extensa superficie de la Reserva, hacen que el desolado paisaje se convierta por momentos en un crisol de colores y texturas que lo convierten en un espectáculo magnífico. También representan un show en sí mismas las coladas de los volcanes, se pueden ver aquí las más extensas del planeta comparadas por los científicos con las encontradas en Marte. En este punto puede mencionarse por ejemplo la del Volcán Santa María, una lengua de roca fundida de 17 kilómetros que, tras enfriarse dio origen al denominado Escorial de la Media Luna. Los reyes de este maravilloso panorama son Payún Liso (el más elevado) y Payún Matrú, el cual durante su última gran explosión, se hundió sobre sí mismo formando una caldera de nueve kilómetros de diámetro, en cuyo interior se encuentra una laguna de aguas cristalinas. Payunia, nacida de la furia del interior de la tierra hace miles de años, es hoy un escenario exquisito y surrealista, ideal para reencontrarnos con la naturaleza y con nosotros mismos. Fotos: Payún Liso y colada, colores del Payún Liso, colores del Payún Matrú, Pampas Negras. (gentileza Dirección de Turismo Malargüe)

miércoles, 17 de abril de 2013

Rincón de Mellado festeja brindando con Chicha

Durante los días 19, 20 y 21 de abril Rincón de Mellado, en la comuna maulina de Sagrada Familia, celebrará la octava Fiesta de la Chicha en la que esperan la visita de miles de personas provenientes de la región del Maule y también de la Argentina, a través de Paso Pehuenche. Los ocres otoñales que ya tiñen las viñas, serán el marco de esta fiesta, que pone en relieve uno de los más tradicionales productos de la región, la Chicha, una bebida dulce y bastante espirituosa derivada de la uva. Esta festividad nació hace unos nueve años de la mano de algunos vecinos de la localidad, entre los que se encontraba el actual alcalde de la comuna, Martín Arriagada; el festejo tuvo en sus comienzos un aire campestre y tradicional y a pesar de ir creciendo cada año, no ha perdido esa esencia alimentada por la presencia de la música popular, artesanía, juegos tradicionales y, por supuesto el deporte nacional chileno…el rodeo. Quienes lleguen hasta estos hermosos parajes disfrutarán además de una espectacular gastronomía entre la que se podrán degustar asados, empanadas, cazuelas y por supuesto los mejores vinos y las Chichas que ofrece la zona, que estarán concursando por ser la mejor de Rincón. Una celebración digna de ser compartida con todos aquellos pobladores que trabajan arduamente la tierra durante todo el año y abren las puertas de su lugar a principios del otoño para brindar con los visitantes por una buena cosecha Fotos: Tomando Chicha en Cacho, Agrupación de Huasos de Rincón de Mellado, Bailarines de cueca con traje de peón, Bailarines de cueca con trajes de patrón

viernes, 12 de abril de 2013

El Maule

La VII Región toma su nombre del caudaloso río Maule que la recorre desde la cordillera de los Andes hasta volcar sus aguas en el Océano Pacífico. Ésta región está ubicada en el centro de la República de Chile y se divide en cuatro provincias: Talca (capital regional), Curicó, Linares y Cauquenes. Maule es justamente el destino al cual se arriba desde Malargüe a través del Paso Internacional Pehuenche. La región maulina es el lugar ideal para encontrarse con las más arraigadas costumbres chilenas en la figura del Huaso, ícono de la cultura nacional que se mantiene desde hace más de cuatro siglos. Es justamente este personaje el protagonista del deporte nacional: el rodeo, que incluye a la vez expresiones de la tradición, artesanía y folclore local. Es innegable que cualquiera sea el paisaje que los ojos de un turista estén buscando, puede hallarse en estas latitudes: lagos, volcanes, ríos, montañas y por supuesto la inmensidad del mar que enmarca y completa un territorio rico no solo en bellezas naturales sino también en historia y costumbres nacidas de la fusión de las diversas culturas que conviven en Chile. Basta sentarse a dialogar con un pescador, un agricultor o una tejedora para comenzar un viaje apasionante por la memoria de un pueblo que aún siente la fuerza del mapuche, ( la “gente de la tierra”), corriendo a través de sus venas y ese viaje sea tal vez el más valioso de todos porque después de él, la perspectiva de cada uno de los paisajes es otra y ya no solo encontramos en el Maule una región de ensueños que invita al descanso y a la paz sino también un lugar que transmite silenciosamente en cada centímetro del territorio la historia viva de un pueblo que puja por no desaparecer. Maule…una tierra que atrapa y enamora. Fotos: Pescador en las costas de Constitución, Rodeo en Rincón del Mellado, Huasos (en Rincón del Mellado)

jueves, 11 de abril de 2013

Pehuenche…el paso entre dos paraísos

Ubicado a 138 kilómetros de la ciudad de Malargüe, en el sur de la provincia de Mendoza, el Paso Internacional Pehuenche es una de las más interesantes alternativas para llegar a Chile. Con una altura que llega a los 2553 metros sobre el nivel del mar, se accede al Paso a través de la Ruta Nacional 145 la cual tiene aún 60 kilómetros de enripiado del lado argentino y una ruta con pavimento estándar internacional a partir del límite con Chile; el Pehuenche une al departamento más austral de Mendoza, que cuenta con una amplia oferta turística paisajística, histórica y científica; con elMaule, la VII Región Chilena, un territorio que, hasta hace un par de años se caracterizaba por poseer una economía basada casi exclusivamente en la agricultura y la pesca pero que en la actualidad está intentando afianzarse como destino turístico, para lo cual le sobran cualidades. La cordillera de Los Andes separa dos espectáculos diametralmente distintos, sin embargo el conjunto probablemente se convertirá en breve en uno de los más buscados entre quienes desean ponerse en contacto con la naturaleza, escapar de la ciudad y disfrutar no solo de los más hermosos paisajes sino también de la idiosincrasia y la hospitalidad de dos pueblos que comparten mucho más que un límite fronterizo. Partiendo de la montaña como paisaje común (pero diferente) a este lado ríos, volcanes y los cielos más límpidos de Sudamérica son el plato fuerte. Al otro, lagos, bosques y mar terminan de convertir esta región en un espectáculo imperdible. Pehuenche, crisol en el que dos pueblos se convierten en un único destino que rebosa cultura, historia y maravillas naturales. Pehuenche… el paso entre dos paraísos. Fotos: Payunia (Malargüe), Paso Pehuenche, Laguna del Maule, Cerro Campanario, Costas de Curanipe (Chile), Costas de Constitución (vista desde Faro Carranza).